Ese pequeño día que despiertas aturdido
sin entender qué es, sin ganas, en fatiga, pero despiertas.
En ese instante de aturdimiento decide
si hoy será un gran día, o sólo uno más.
Elige cómo vivir, sentirte, respirar.
Eres quien crea tu vida,
siempre recuerda que sólo tú eres responsable de cómo estar hoy.
Puedes despertarte y maldecir el dulce sol,
o sonreír a la nube que lo cubre.
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